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El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Grupo del Banco Mundial (GBM) celebran esta semana sus reuniones anuales en Washington DC para debatir los numerosos retos a los que se enfrenta actualmente la economía mundial. Mientras esto ocurre, el primero ha vuelto a recortar su previsión de crecimiento económico mundial para 2023. Esta última revisión supone la cuarta corrección a la baja de este año.
Que la OPEP haya decido recortar su oferta en 2 Mill de barriles (se producen diariamente 100 Mill), es una mala noticia para los precios cuando el mundo se encuentra embarcado en el propósito de reducir la inflación.
La amenaza de uso de armas no convencionales en Ucrania ya salta a los análisis de los medios económicos, todavía a nivel de hipótesis y sin entrar en consideraciones económicas, muy difíciles de hacer por otra parte. Hay que ir 60 años atrás, a la crisis de los misiles de Cuba, para encontrar comparables con la preocupación que despierta en la opinión pública. Aquello se resolvió en días. La crisis actual no parece de resolución tan inmediata.
Reino Unido se aventura en una arriesgada apuesta de incierta salida. La presentación de un presupuesto extraordinario la semana pasada propició una nueva sacudida a la baja de la libra esterlina que perdió la referencia de 1.10 frente al dólar por primera vez desde 1985.
Los ricos son cada vez más ricos, y cada vez son más. Esta es la conclusión a la que llegan los expertos inmobiliarios de Knight Frank en su último informe The Wealth Report 2022, según el cual el número de personas con un patrimonio neto ultra alto (“Ultra high-net-worth individual” o UHNWI, por sus siglas en inglés), es decir, con un patrimonio neto igual o superior a los 30 millones de dólares, aumentó en torno al 9,3% en todo el mundo entre 2020 y 2021. Además de los activos líquidos, el cálculo de la riqueza incluye la propiedad de tierras e inmuebles.
A los Presupuestos Generales del Estado se les llama, y con razón, el Evangelio de un país por la importancia que tienen para su administración en todos los campos. La vicepresidenta Nadia Calviño ha pensado siempre - dada su procedencia “europea” y los usos y costumbres que reinan en Bruselas - que necesitaba a cuatro apóstoles para que lo difundieran en Europa y, sobre todo, entre los miembros de la Comisión, el Parlamento y el Banco Central, sin olvidar el Fondo Monetario Internacional. En uso interno las negociaciones con sus socios de dentro y fuera del Gobierno avanzan en la dirección adecuada.
No se puede decir que al euro le vayan bien las cosas. Cualquiera que tenga que comprar diariamente divisa, casi cualquier divisa, se acordará de los pronósticos que se hacían para estas alturas del año, y sentirá como si le doliesen las muelas.
Australia, Brasil, Reino Unido, India, Nueva Zelanda y Noruega. Todos ellos han subido tipos en agosto en 50 pb. México e Israel en 75 pb. Al margen de la heterodoxa Turquía, solo China los recortó en 5 pb. Aunque se han dado registros mensuales negativos en los datos de julio en un buen número de economías, sobre todo europeas y en EE.UU., los datos interanuales de inflación de los principales países siguen en el entorno del 9%, cifra que casi o más que se duplica en algunos países del este europeo.
Por Marta G. Galán.- El sector turístico español se va recuperando poco a poco del impacto de la pandemia de coronavirus, aunque aún sigue lejos de las cifras previas a la crisis sanitaria. Este año con ser bueno no se llegará probablemente a las dos terceras partes de los más de 80 millones de visitantes que llegarón a España a veranear.
Guerra en Ucrania, fricciones geopolíticas, inflación, tensiones energéticas, olas de calor... 2022 ya se considera un año de crisis. Y como en todos los periodos de crisis, hay ganadores. Esta vez se trata de las grandes compañías petroleras, que están obteniendo ganancias récord mientras los precios de la energía se disparan. La empresa anglo-holandesa Shell, por ejemplo, obtuvo un beneficio o utilidad neta de 11.500 millones de dólares entre abril y junio de este año, lo que supone más del doble de lo conseguido en el mismo periodo de 2021.
Por Marina Pasquali/ Statista. La moneda estadounidense está fortaleciendo su posición en comparación con las principales monedas del mundo. En lo que va de 2022, el valor del dólar ha tocado niveles que no se veían desde principios de los 2000, casi alcanzando la paridad con el euro y creciendo fuertemente frente al yen japonés, una de las monedas más estables en las últimas décadas. El dólar también ha ganado terreno frente a la libra esterlina –casi en la misma magnitud que con el euro– y en menor medida con respecto al yuan chino.
| Christine Lagarde (BCE) y Jerome Powell (Reserva Federal USA) en Sintra. |
Cuando tienes que llegar a un acuerdo entre 19, y además presumes de que lo que allí se adopta es unánime; o se da una alineación de astros, cosa rara, o no hay modo de ser unánime si no es como resultado de una negociación. Es sabido que un buen acuerdo exige que todas las partes se levanten con la sensación de haber cedido algo. Y no hace falta ser un lince para intuir que, en la reunión del BCE del jueves, la trascendencia de lo que allí se discutía exigía de cesiones por todas las partes.
Todos los días la amenaza de un Apocalipsis económico llena las redes sociales y los medios de comunicación. Ya se encargan desde Europa de recordar lo insoportable que es tener deuda, paro, iflación, inmigración… todo ello descontrolado, peor la pregunta es sencilla: ¿podrá España pagar alguna vez todo lo que debe?. La respuesta es aún más sencilla: nunca. Ese es el as en la manga que tienen la vicepresidenta Calviño y la ministra Montero. Toda Europa, todo el mundo está igual. Nosotros, en intereses anuales, ya pagamos más de 40.000 millones.
Otra semana más, y ya va la tercera, de fuerte apreciación del dólar. El USD Index, en el que el euro pesa un 58%, empieza a dibujar tras el 4% de subida en las últimas tres semanas una especie de parábola ascendente casi vertical en la que también colabora la rápida depreciación del yen, con un peso en el índice del 13.5%.
La ruptura de la paridad en la relación del euro con el dólar tiene más valor simbólico que económico, pero la apreciación del dólar es un factor desestabilizador añadido sobre la economía mundial.
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