La radio y el servicio público

Yo he sido uno de los invitados por la BBC para contar la experiencia española durante la transicion politica de la dictadura a la democracia y he sentido una cierta añoranza de cuando hace un montón de años, los periodistas españoles aportamos nuestro esfuerzo, nuestra ilusión, nuestra lucha y nuestra responsabilidad por hacer que la sociedad española accediera en igualdad de condiciones y oportunidades a una información libre y plural.

En estos momentos en los países árabes – hayan vivido una revolución o intuyan que pueden vivirla – existe una conciencia clara de que los ciudadanos reclaman una apertura y una comunicación plural porque el poder en democracia no puede ser titular del monopolio de la información .

Lo más interesante de este encuentro han sido las numerosas cuestiones que nos han planteado los asistentes al curso (cerca de cien periodistas argelinos). Son las mismas inquietudes que tienen los periodistas de cualquier pais que transita hacia un sistema más plural. En Argelia se preparan para la llegada de las emisoras privadas de radio y la ilusión que sienten los periodistas va en paralelo a la preocupación que tiene el gobierno, que sin embargo está decidido a dar ese paso por convicción y por necesidad.

Lo que une a los periodistas argelinos en estos momentos es afrontar el reto del cambio, y en ese objetivo están en plena sintonía. Solo toman partido por ese objetivo común y aun no han tenido tiempo de descubrir las distintas trincheras políticas que al final hacen que la información deje por el camino jirones de la objetividad. Añoro la etapa en la que los periodistas españoles no teníamos más enemigos que los enemigos de la democracia, pero cada pais construye su propia historia y,a veces, destruye sus mejores recuerdos. Por eso creo que Argelia tiene mucho camino que recorrer y yo espero y deseo que tengan éxito porque en un mundo globalizado, su éxito será también el nuestro.