Aunque la última encuesta del CIS de Tezanos todavía da al PSOE como ganador en unas hipotéticas elecciones, las predicciones de los sondeos privados aseguran que el PP es ya el partido que recibiría más votos si los comicios se celebrasen mañana. El Observatorio de El Confidencial, por ejemplo, afirma que “Feijóo apuntala su perfil centrista y recibe más de un millón de votos de PSOE y Cs”.
Sin embargo, el nuevo líder del PP no acaba de dar el tirön electoral que se esperaba tras desahuciar a Pablo Casado para acentuar así su carácter centrista e intentar reconducir al redil al votante de Vox. Por lo pronto, el 19 de junio se verá si el PP no solamente logra una victoria clara, sino si Moreno – y por ende Feijóo- logran recuperar votos que se marcharon al partido de Abascal, cosa que según las encuestas actuales no parece que vaya a ser así.
Si Juanma Moreno tiene que contar e incluso aceptar un gobierno de coalición con Vox, el efecto Feijóo se diluirá y obligaría al ex presidente gallego a seguir una estrategia muy parecida a la que tuvo que aceptar el 10 N de 2019 cuando tras afirmar que no dormiría tranquilo con Pablo Iglesias en su gobierno, tuvo que tragarse el gobierno de coalición.
Una repetición del gobierno PP-Ciudadanos en Andalucía sería la mejor solución para Moreno y Feijóo, algo muy difícil de repetir tanto a nivel estatal como en otras Comunidades como se ha visto en Castilla y León, donde Alfonso Fernández Mañueco tuvo que pasar por el aro de gobernar con Vox después de abandonar a Ciudadanos.
Conseguir votos del centro, procedentes de Ciudadanos y sobre todo del PSOE, asegura a Feijóo ganar las elecciones, pero no la mayoría absoluta como la que logró, por última vez, Mariano Rajoy en 2011 cuando el gobierno socialista de Zapatero entró en caída libre por la crisis económica.
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