Felipe, el colombiano

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Por estos mundos de Dios hay apátridas, inmigrantes en pateras que huyen del lugar en el que nacieron, gente desterrada, ciudadanos sin tierra en la que habitar y refugiados en embajadas que no pueden salir a la calle porque les espera la policía. También existen los catalanes que son una especie...

... que está muy de moda porque se quieren ir de una patria en la que no se sienten a gusto e inventarse otra que imaginan como la Arcadia feliz, o al menos así se lo han hecho creer.

Pero como la suerte está muy mal repartida hay otros seres privilegiados que, por distintos motivos, tienen más de una nacionalidad que es un favor que le hacen algunos Estados a gente famosa en agradecimiento a los méritos que han acumulado a favor de de quien les distingue.

Por ejemplo el peruano Mario Vargas Llosa es también español a causa, entre otros méritos, de su exquisita utilización de nuestro idioma, la estadounidense Angelina Joile es camboyana por su ayuda financiera para preservar la fauna y flora de ese país y el francés Gerard Depardieu tiene la nacionalidad rusa, imagino que en agradecimiento a los litros de vodka que ingiere anualmente.

Pero no hay que olvidar que existen un montón un montón de españoles que son queridos, y hoy es noticia el ex presidente de gobierno Felipe González porque ha recibido de manos del Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos la condición de ciudadano de aquel país “ por ser un ser extraordinario”, según ha afirmado el mandatario colombiano.

Yo creo que eso siempre es un motivo de satisfacción y además es cierto que González ha mantenido una estrecha relación con aquel país y en especial con algunos de sus más singulares ciudadanos, como fue Gabriel García Márquez.

Ser presidente del gobierno de España da para mucho si durante el tiempo de su mandato se saben establecer vínculos de afecto y de relación con gente importarte. Yo no tengo muy claro que Felipe González sea un ser extraordinario pero al menos hay que reconocerle una cierta simpatía personal y capacidad de seducción que son dos cualidades que agradan a los que reparten esos privilegios, y por eso pienso que tal vez esté aún a tiempo de acumular más pasaportes.

Aznar tuvo muy buenas relaciones con George Bush, pero ya se sabe que los americanos del norte son muy suyos y no les gusta pasarse en los obsequios y reconocimientos. Para ellos solo se puede ser ciudadano de su país si has nacido allí o eres un latino de reconocido prestigio, que no es el caso.
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