La figura de un futbolista irrepetible y de una persona fuera de este tiempo, ajena al brillo de la fama, el poder del dinero y los convencionalismos, entra el libro Mágico González, la leyenda, publicado por la editorial Dalya y escrito por el periodista y escritor Enrique Alcina Echeverría.
El escritor gaditano Luis García Gil observa: “Con su poderosa escritura, Enrique Alcina le canta a Mágico como si se tratara de una leyenda del rock o una leyenda del flamenco, como Camarón de la Isla, su calcomanía en las tascas, ventas y tabernas de la noche infinita. El libro entra ya de lleno entre los clásicos de la literatura balompédica, que por cierto atraviesa un momento dulce con publicaciones dignas de interés, demostración de que el fútbol es más cultura que opio del pueblo “.
“La leyenda Mágico González es mi infancia de cromos y partidos en la calle. La prosa magnética de Enrique Alcina ha obrado el milagro de imprimir en páginas de oro la leyenda del astro salvadoreño, la verdad de sus mentiras, el rastro de sus hazañas y de sus fintas imposibles. Léanlo. No se arrepentirán“.
El genial artista del balón, que tras enamorar con su juego eléctrico en el Mundial de 1982, en las filas de la selección de su país, El Salvador, se quedó a jugar en España, al sur del sur, se ha convertido en un mito para varias generaciones de aficionados.
Cubrió de gloria casi una década de historia de un club pequeño, el Cádiz, de una ciudad alegre y luminosa, Cádiz, y se extendió sobremanera su reputación de extraordinario futbolista y de joven noctámbulo. Tan decisivo y resplandeciente en la cancha, los domingos, como irregular durante la semana, Mágico, maestro del regate, la sorpresa, el engaño, la velocidad punta y el toque exquisito, hechizó a propios y extraños.
El libro recrea las gestas de Jorge, sus goles inverosímiles, la trayectoria del Cádiz a lo largo de tres décadas fascinantes, el dulce recuerdo de sus compañeros, las sombras de los días grises, el tour con Maradona, el exilio, el regreso triunfal, la cara y la cruz de una época inolvidable y de un tipo exclusivo, el Mago, quien no entendía el fútbol como un trabajo, sino como pura diversión. El sensacional delantero salvadoreño destacó en la calle por su cercanía, su bondad y generosidad, y por su excéntrico espíritu travieso. Un personaje literario, una estrella del rock.
Ángel Pinto, por su parte, resalta: “Como el propio Mágico, el libro es caótico y torrencial. No busquen el orden ficticio de las estanterías, porque lo que Alcina ofrece es el arco iris cambembo de la ropa amontonada del Piojito, el alboroto de coplas entreveradas de arena en las barbacoas seminales, una rebujina, en fin, de anécdotas sabrosas, contextualizadas, inapelables. Y al final, del volcán de un verbo vehemente que glosa a un futbolista imposible, surge la crónica de una generación que se vertebró en torno a un equipo, a un color, a un mito. Un libro caliente y salado que trasciende su propósito inicial:
Si (
No(